“Evaluación de la adaptación y productividad de cinco gramíneas para corte, bajo las condiciones climáticas de la granja Bengala en Filandia, Quindío”, es el nombre del proyecto liderado por Jaime Hurtado y Rigoberto Villa, profesores de los programas de Tecnología Agropecuaria y Tecnología Agroindustrial de la facultad de Ciencias Agroindustriales.
El
trabajo de investigación, que inició en junio de 2010 y finalizó en febrero de
2012, propuso evaluar la cantidad de forraje verde producido por cinco gramíneas
(pastos) durante cinco cortes para cada una de ellas, bajo las condiciones
ambientales naturales de la granja experimental Bengala de la Universidad del
Quindío.
La
evaluación se enfocó en encontrar las especies forrajeras gramíneas que mejor
se adaptaran y produjeran biomasa en ese
entorno ecológico.
“El
proyecto quiso hacerse porque en la actualidad las condiciones climáticas han cambiado
mucho; los pastos para pastoreo están muy acabados como consecuencia de los
intensos veranos e inviernos, lo que representa una gran dificultad, ya que el
alimento de los bovinos está en riesgo”, comentó Hurtado.
Aunque
las condiciones medioambientales de la región donde se desarrolló el trabajo de
investigación eran de tipo marginal para el establecimiento de las gramíneas
para corte, el interés que merecen las especies para la alimentación de los ganados
en esta zona es relevante, por tal razón se hizo urgente proponer o sugerir especies
forrajeras para ofrecer alternativas de gramíneas productivas que aseguren el
alimento de los ganados bovinos para leche del sector.
El
trabajo contempló en su desarrollo la producción de biomasa en estado verde de
las gramíneas Guinea, Gramafante, Kinggrass, Maralfalfa e Imperial.
Después
del recorrido en la metodología del estudio, se pudo concluir que el orden de
producción de forraje verde, de mayor a menor de las gramíneas, inicia con el Gramafante, seguido por Kinggrass y Maralfalfa, dejando en los últimos lugares al
Guinea e Imperial en cuanto a producción.
“La
importancia de este proyecto radica en que, mediante esta forma, se puede
llegar a las comunidades de la región y darles opciones de especies forrajeras
que les dan mejor producción y desarrollo, y sobre todo, les ayuda a afrontar
las condiciones tan drásticas del clima”, sostuvo Rigoberto Villa.
La
Vicerrectoría de Investigaciones de la Universidad del Quindío y la granja experimental
Bengala, fueron los principales colaboradores para la realización de esta
investigación presentada por la facultad de Ciencias Agroindustriales, como uno
de sus proyectos más abanderados y exitosos.
Beatriz
Elena Díaz
Agencia
Q
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