Durante
cuatro horas la palabra se tomó el auditorio de Ciencias Básicas y Humanas, el
pasado miércoles 20 de junio, en la Narratón Final del semestre, con la
participación de estudiantes pertenecientes a los cursos de Cuentería del nivel
I y II, y de Tejecuentos (grupo representativo de narración oral de la Universidad del
Quindío), quienes se encargaron de dibujar imágenes en la mente de los asistentes,
y de desencadenar sonrisas y aplausos durante la noche.
Esta
ocasión fue la excusa para reunir no sólo a quienes actualmente hacen parte de
estos cursos y grupo de cuentería universitaria, sino también a sus fundadores,
a aquellos que dieron paso al progreso de dicha disciplina oral y cultural del
alma máter.
Allí
estuvieron presentes algunos de ellos: David Fernando Agudelo, egresado de
Licenciatura en Español y Literatura; Luisa Fernanda Ospina, egresada de
Licenciatura en Lenguas Modernas; y Jairo Alberto Cardona, ‘El filósofo’, quien
con “El juego” animó al público mediante su novedosa intervención de narración
oral escénica que incluyó personaje narrador, vestuario, y efectos de sonido.
Además
de aquella intervención que narró las vivencias de Adolf Hitler desde una óptica
diferente, otras historias variadas tuvieron su lugar en el escenario.
Néstor
Raúl Giraldo, ‘Guápulo’, también tuvo la oportunidad de contar; y fue ésta la
que le permitió recordar y revivir un capítulo de su vida, pues hace un año no hacía
el ejercicio de contar. Lo que más disfruta de esto es el manejo de público, ya
que como menciona, se puede hacer reír o pensar.
El
objetivo de este evento, según Luis Arango ‘Piripi’, director del Grupo y los
cursos de Cuentería de la Uniquindío,
fue mostrar los resultados del proceso y seguir “propagando” esta disciplina en
el espacio universitario.
Andrés
Muriel, estudiante de noveno semestre de Ingeniería de Alimentos, comenta que
se enteró de la actividad a través del correo institucional y calificó como
pertinente la realización de estos, puesto que “se hace una pausa activa haciendo parte de la cultura
universitaria, y se tiene un rato agradable”.
Por
su parte, Tatiana Arcila, estudiante de segundo semestre de Lenguas Modernas
expresó que “es demasiado bueno, es arte, por tanto todo arte abre la mente (…)
todas las palabras van directamente a tu
pensamiento y empieza a crear imágenes en ti y ya tu armas tu propia historia con
base a lo que ellos están contando. Tú debes despejar tu mente, porque tanto
estudio te genera intranquilidad. Es bueno porque te distrae totalmente”.
Luis
Arango, aprovechó la ocasión para hacer una cordial invitación a la versión número
ocho del Festival ‘Había una vez, un cuento para la ciudad’, el cual se llevará
a cabo durante la primera semana del mes de octubre.
De
esta manera finalizó el semestre, con sonrisas, historias diversas, aplausos y
puro cuento.
Killy
Alejandra Gutiérrez Guzmán
Agencia
Q
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