Hace
dos meses que el Ministerio de Educación Nacional (MEN) renovó el registro
calificado, por el termino de 7 años, al programa de Comunicación
Social - Periodismo de la Universidad del Quindío, por considerar que “presta a
la comunidad un servicio con calidad referido a resultados académicos, así como
a los medios y procesos empleados, a la infraestructura institucional y a sus
dimensiones cualitativas y cuantitativas”.
El
registro calificado significó para el Programa el cumplimiento de un compromiso
con la sociedad, ya que es un requisito indispensable para seguir con el
anhelado proceso de acreditación de alta calidad.
Como
la respuesta del MEN no llegó a tiempo, el Programa no pudo abrir inscripciones
para nuevos alumnos para el segundo semestre del 2013.
Pedro
Felipe Díaz Arenas, director del Programa, habló con Agencia Q sobre lo que le
espera al programa después de haber obtenido el registro calificado.
¿Cuántos
cupos abrió Comunicación Social - Periodismo para el primer semestre de 2014 y
cuántos inscritos se esperan?
Tenemos
una serie de expectativas frente a las inscripciones de posibles estudiantes
bachilleres. La Universidad tiene por política desde el Ministerio de Educación
un cupo máximo de 50 estudiantes, como cada semestre. Los estudiantes
inscritos a principio de año siempre sobrepasan los 280 aspirantes y a mitad de
año se merman a 215, para abrir un solo grupo de 50 estudiantes y eso ya está
establecido.
¿Qué
recomendaciones e instrucciones entregó el Ministerio de Educación Nacional
para el Programa después de otorgar el registro calificado por 7 años?
El
documento de registro calificado se envía al Ministerio de Educación, ellos
hacen una evaluación y a partir de esa evaluación deciden si lo otorgan o no, y
eso es como un permiso para continuar con el proceso de acreditación de alta
calidad. En primera instancia ellos hacen una radiografía de las potencialidades
que tiene un programa académico y a partir de ello, deciden si es factible que
se acredite y es el Programa el que decide si tienen la capacidad, debido a la
inversión de tiempo y dinero que esto implica.
Se
deben apropiar los proyectos que hay, potencializar todos los proyectos que
existen, además del talento humano, el recurso físico
(infraestructura) y el recurso técnico.
En
ese sentido, ¿la aplicación de esas recomendaciones ya simbolizan un paso para
el proceso de acreditación?
Sí,
claro, donde no fuera un paso sencillamente no nos hubieran otorgado el
registro calificado.
¿Cuál
es el siguiente paso para llegar al proceso de acreditación?
Hacer
una agenda antes que finalice el año para arrancar a trabajar el tema de alta
calidad. Hacer un inventario cotejado con las dos visitas de pares anteriores,
cotejar ambas recomendaciones y fortalecer lo que tenemos. Por ejemplo hacer
inversión en el estudio, que tenga un nivel alto de calidad en la producción
estética y de contenidos, proyectos personales de profesores y de
estudiantes, posicionar los medios que se tiene, obtener más participación en
los canales de televisión locales, tener proyectos de grado con mayor impacto,
que no sean endógenos sino exógenos.
Podemos
fortalecer el tema de cualificar lo académico, que esté más a la vanguardia
mediática, que esté de acuerdo a las necesidades que requiere el mercado
nacional e internacional, porque nos están
midiendo con estándares internacionales de calidad.
¿Usted
como director cree que Comunicación Social - Periodismo si está preparado para
afrontar este reto?
El
Programa ya tiene una capacidad instalada y una capacidad muy buena de talento
humano estudiantil. Los estudiantes tienen un sentido de pertenencia muy fuerte
por el tema de la comunicación y obviamente por la carrera y eso quedó muy
claro con la visita de pares. El secreto está en el capital humano, en el
capital de producción y la agenda que nos dé la Vicerrectoría Académica para ir cumpliendo las metas; tenemos mucho para mostrar.
Para
cualificar los procesos académicos, a veces no se cuenta con un tutor
constante, entonces los estudiantes se dispersan y esto hace que los proyectos
no se posicionen y no impacten, pero hay muchas ideas, entonces lo que ahora
necesitamos es posicionar todos los proyectos que tenemos, no crear más.
¿Exactamente
qué evaluarían en una próxima visita?
La
visita es mucho más rigurosa. Si uno quiere ellos vienen ya, pero no estaríamos
listos porque ellos miden un progreso, los parámetros son los mismos, pero son
mucho más exigentes porque necesitan ver el mejoramiento, todo lo miden con
respecto a la capacidad de la universidad pública, la capacidad intelectual y
formación de los docentes, infraestructura, entre otras.
¿Cuál
es el tiempo posible para lograr una acreditación de alta calidad?
Si
se arranca ya, podríamos tenerlo en un año y medio o dos, comprometiendo
recursos económicos y humanos porque se puede tener mucho dinero, pero si no se
tienen los profesores y los proyectos cualificados, no sirve de nada.
¿Por
quién estuvo liderado el proceso de registro calificado y quién liderará el de
acreditación de alta calidad?
El
proceso estuvo liderado por la doctora Bibiana Magaly Mejía, con un equipo de
trabajo y con un grupo de estudiantes que se comprometieron mucho con el tema y
con los documentos para llenar los requisitos de registro calificado. Ella
lideró el proceso constantemente, día y noche. Todas las peticiones de la
Unidad Académica de la Vicerrectoría Académica inmediatamente se respondían.
Justamente eso es lo que se necesita para el proceso de acreditación, al menos
dos personas más como ella que entiendan el proceso y que sean virtuosos y
comprometidos con un grupo de estudiantes activo.
Daniela
Russi
Agencia
Q
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