Aproximadamente
60 personas, entre estudiantes, docentes, administrativos del programa de
Medicina y profesionales del área, asistieron el miércoles 13 de marzo al
auditorio de Ciencias Básicas y Humanas de la Uniquindío, entre las 7 y 8 de la
noche, para conocer de primera mano los avances en la materia.
El
glioblastoma multiforme es uno de los tumores cerebrales más frecuentes y
nocivos que existen. Los tratamientos médicos y científicos para extender en
meses la vida de cada paciente que sufre este tipo de patología cuestan
alrededor de 400 millones de pesos.
La
vacuna que ha desarrollado el Dr. Stathopoulos busca mejorar la calidad de vida
de estas personas, pero con la intención de lograr que por precio sea accesible
para los pacientes.
Jairo
Torres, médico recién egresado del Alma Máter, comentó que “la semana pasada
salió en la revista Semana que la mortalidad por cáncer en Colombia,
especialmente en niños, es el doble que la del resto del mundo, lo cual muestra
cómo se tiene de olvidado este campo, especialmente en las políticas de salud
pública actuales. Es muy interesante ver que en otros países han avanzado en
investigación y que cada día se buscan terapias para mejorar la calidad de vida
de estos pacientes”.
Agencia
Q entrevistó al Dr. Apostolos Stathopoulos, especialista en neurología y Phd en
inmunología, jefe del departamento de neurocirugía del Hospital Vivalia en
Virton, Bélgica.
A
grandes rasgos, ¿en qué consiste la vacuna contra el cáncer cerebral
(glioblastoma)?
El
principio y la idea fundamental está basada en educar al sistema inmune para
que tenga una reacción, reconozca las células tumorales y las mate.
En
este momento, ¿ya es comercial la vacuna?
Para
comercializar la vacuna es necesario hacer fase 1 y fase 2, ya aplicamos para
ella en los Estados Unidos, esperamos en pocos días tener la respuesta
positiva. Aún no se puede comercializar la vacuna como tal, solamente tiene
aprobado uso compasivo, es decir, cuando ya se han hecho todos los tratamientos
de recesión quirúrgica, quimioterapia, radioterapia y ya no hay nada más para
hacer.
Normalmente
las vacunas son preventivas, pero debido al estado en que se autoriza la
vacuna, que es en el último estado, es terapéutica. Sin embargo, es importante
tener en cuenta que en los estudios se induce una respuesta de células de
memoria, educado el sistema inmune para que no vuelva a reincidir el tumor, y
desde ese punto de vista es preventiva, porque no va a volver el tumor.
Iindudablemente en la medida que avancemos vamos a tener la vacuna en estados
más tempranos, que es lo ideal porque podría ser terapéutica y preventiva.
El
costo de los tratamientos para aliviar de alguna manera a las personas con
cáncer cerebral son muy altos ($400 millones), ¿qué tan accesible sería una
vacuna como la que se está trabajando?
Es
cuestión del número de casos que demande la vacuna, porque no es lo mismo hacer
caso a caso, como se están haciendo ahora, porque es una vacuna por paciente,
que hacer mil vacunas. Lo que se espera es que en dos o tres años baje mucho el
precio de la vacuna.
Es
importante tener en cuenta que el precio de la vacuna puede ser pagado por las
aseguradoras y en otros casos por el Gobierno como en Europa cuando no lo hace
la aseguradora.
¿Se
han presentado casos exitosos con el uso de la vacuna?
Todos los casos son exitosos teniendo en cuenta que aquí no se
trata de curar el cáncer en una fase tan avanzada, pero se le da una sobrevida,
lo que se debe tener en cuenta es que cada mes de vida que se le aumenta a un
paciente es una eternidad en términos de tratamiento, y aquí se están
aumentando más del doble, incluso el triple, entonces sí es exitoso.
¿El
uso indiscriminado de teléfonos celulares puede causar este tipo de cáncer?
La
toxicidad o el daño que hace un celular es igual al daño que hace un café, no
hay un estudio que compruebe que el uso del celular genere cáncer.
Jazmín
Martínez Sierra
Agencia
Q
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